31 de marzo de 2013

Respeto a nuestras autoridades

El respeto como vimos anteriormente cuando hablamos del respeto que debemos tener hacia nuestros padres, no solo se refiere a la actitud de honor hacia alguien, sino tambien de valorar, obedecer, respetar, reconocer y no juzgar. Teniendo en mente estas características del respeto, podemos comenzar diciendo que el irrespeto hacia los demás se puede expresar de varias maneras, como por ejemplo insultando, golpeando, gritando, etc.

Por eso es que Dios nos manda a respetar a tod@s con los que nos rodeamos, en cada momento del día, sea la escuela, colegio, universidad, trabajo y por supuesto en nuestra casa. Y muchos de nosotros podemos tener problemas con respetar a nuestras autoridades, sean nuestros padres, jefes, profesores, tios, hermanos mayores o abuelos.

"Recuérdales a todos que deben mostrarse obedientes y sumisos antes los gobernantes y las autoridades. Siempre deben estar dispuestos a hacer lo bueno a no hablar mal de nadie, sino a buscar la paz y ser respetuosos, demostrando plena humildad en su trato con todo el mundo."
Tito 3:1-2


Ten presente que es una de nuestras obligaciones como jóvenes cristianos, una obligación que no es negociable, que no puede ser practicada ciertas veces solamente. Y si te sirve como ayuda, recuerda que el respeto es bidireccional, es decir, que si quieres recibir respeto debes dar primero respeto.

"Obedezcan a sus dirigentes y sométanse a ellos, pues cuidan de ustedes como quienes tienen que rendir cuentas. Obedézcanlos a fin de que ellos cumplan su tarea con alegría y sin quejarse, pues el quejarse no les trae ningún provecho."
Hebreos 13:17

Finalmente, tengo que reconocer que por el irrespeto es que somos conocidos generalmente los jóvenes, que por nuestra actitud incorrecta de referirnos y tratar a nuestros superiores es que nos hemos ganado la fama de ser rebeldes, algunos con causa, otros sin esta. Pero recuerda que no estamos aqui para seguir siendo los mismos, sino que estamos en esta vida para ser cada dia como Jesús.

Dios te bendiga
DC

24 de marzo de 2013

Rico bien pobre

Muchos jóvenes podemos pensar en que no tenemos nada; no tenemos un departamento, un auto, un celular de última tecnología, la última consola de videojuegos, el ultimo modelo de laptop, etc. Sin darte cuenta la bendición que es tener a nuestra familia con nosotros, la bendición de poder compartir tiempo con nuestros seres queridos y el honor de ser hijos de Dios.

Al final amig@, no servirá de nada las cosas materiales; y ese es el punto de esta semana, el que no confies primero en el dinero, en tu trabajo, en tu capacidad, en tu cuenta bancaria sino en Dios. Es por esto que Jesús nos advierte que:


"¡Tengan cuidado! - advirtió a la gente- Absténganse de toda avaricia; la vida de una persona no depende de la abundancia de sus bienes."
Lucas 12:15

Presta mucha atención a tus actitudes con respecto al dinero, si es que te duele regalar dinero, si buscas cualquier razón para almacenar tu dinero, si no te gusta prestar dinero a quien lo necesita o si simplemente crees que estas bien porque tienes dinero en tu bolsillo. ¿Que pasaría si mañana no tienes ni una moneda?

Es verdad que Dios quiere bendecirnos con sobre abundancia, pero no quiere que nosotros anhelemos unicamente esa abundancia, si es que vemos la necesidad de personas cercanas a nosotros y no hacemos nada.


Te recomiendo que leas Lucas 12 desde el versículo 13 al 21 para que así entiendas de mejor manera el contexto en el cual habla Jesús acerca de esta parábola. Sin embargo, leamos los 20 y 21 por el momento:

"Pero Dios le dijo: ¡Necio! Esta misma noche te van a reclamar la vida ¿Y quién se quedará con lo que has acumulado? Así le sucede al que acumula riquezas para sí mismo, en vez de ser rico delante de Dios."
Lucas 12:20-21

Finalmente, recuerda que nuestra seguridad consiste en esperar la voluntad de Dios en nuestras vidas, en creer que es Él quien ve por nuestras necesidades. Y que si Dios te ha bendecido con cosas materiales no es para que te glories, sino que hagas llegar el reino de Dios a tus seres cercanos para que así sea Dios quien se lleve la gloria.

Dios te bendiga
DC

17 de marzo de 2013

Oracion III

En entradas anteriores hemos hablado sobre ciertas cosas puntos de la oración, las cuales las puedes revisar aquí. Continuando con este tema, esta semana hablaremos sobre dos aspectos importantes que Jesús nos enseña cuando vayamos a orar.

"Por eso les digo que: Crean que ya han recibido todo lo que están pidiendo en oración, y lo obtendrán. Y cuando estén orando, si tienen algo contra alguien, perdónenlo, para que también su Padre que está en el cielo les perdone a ustedes sus pecados."
Marcos 11:24-25

En este pasaje mi Señor Jesús está hablando sobre dos aspectos que lo trataremos por separado. El primero se refiere a la manera en la cual debemos pedir cuando estemos orando. Esto por cierto, no quiere decir que la oración no es sinónimo de petición y mucho menos que Dios está obligado a concedernos todas nuestras peticiones. Sino más bien, se refiere a nuestra falta de fe, nuestra poca capacidad de comprender que Dios puede hacer milagros en nuestras vidas.

El segundo aspecto, trata acerca de la falta de perdón que nosotros tenemos hacia nuestros hermanos que nos lastiman. Obviamente tu puedes pensar que no es fácil decirlo, solo te quiero recordar que no es algo opcional sino una orden de parte de Dios, que te dice que prefiere que vayas y te reconcilies con esa persona antes de hablar en oración con Él.

Finalmente, recuerda a estos dos puntos que hemos visto en tus oraciones diarias. Pues es importante que creamos que Dios es todopoderoso, que Él es el único que puede hacer milagros cuando todos los demás te dicen que es imposible. Y que es necesario que estemos a cuentas con todos nuestros hermanos, que Dios no nos está sugiriendo el perdonar a quienes nos ofenden sino que nos manda a reconciliarnos con esas personas.

¨Nunca digas: <<Me vengaré de ese daño!>> Confía en el Señor, y él actuará por ti.¨
Proverbios 20:22

Dios te bendiga
DC

Nota: La imagen mostrada fue tomada del blog snoringscholar.

10 de marzo de 2013

Honra a tu padre y a tu madre

Hablemos de nuestra obligación como hijos con nuestros padres, de la hermosa bendición de tenerlos y de la capacidad que tenemos de ser bendecidos por ellos, por lo tanto recordemos uno de los 10 mandamientos:

"Honra a tu padre y tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios."
Exodo 20:12

Para lo cual definamos lo que implica el honrar a nuestros padres, puesto que honrar es:

  • Valorar, lo que hacen e hicieron nuestros padres por nosotros.
  • Obedecer, comprendiendo que nuestros padres tienen la experiencia y conocimiento que a nosotros nos puede faltar.
  • Respetar, una de las cualidades más perdidas últimamente por nosotros los jóvenes, pero muy necesario para recibir bendición.
  • Reconocer la autoridad de nuestros padres,
  • No juzgarlos sino perdonarlos.
Como hijos debemos saber que nuestros padres desean lo mejor para nosotros, que son las personas que nos amaron desde que supieron que naceríamos. Recuerda que es un honor tener a nuestros padres vivos, que no tod@s tienen ese privilegio, y que a muchos les encantaría cambiar lo que sea por volver a tenerlos con vida.

Es común, que entre nosotros podamos pensar que nuestros padres no nos comprenden, que no saben que ahora las cosas son diferentes a como lo eran en su tiempo, pero recuerda que si nosotros no somos perfectos, nuestros padres tampoco pueden serlo. Muchas veces se podrán equivocar, pues son humanos; pero nosotros no somos nadie para juzgarlos.

Pese a que muchas veces nosotros como hijos, les lastimamos o les ofendemos, nuestros padres son las personas que siempre estarán en las buenas y en las malas.

Sin embargo ten algo en cuenta, porque así como somos de hij@s, así mismo saldrán nuestros hij@s. Por eso en vida debemos decirles cuanto les amamos, cuan importantes son para nosotros, agradecerles por amarnos tanto, por darnos la vida; por lo tanto ahora debemos vivir para honrarlos, con nuestras actitudes y actos.

Y si tu no conociste a tu padre o a tu madre, Dios te quiere decir, que él siempre te amó, y que nunca te abandonará.

"Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá en sus brazos."
Salmos 27:10

Dios te bendiga
DC

Nota: La imagen mostrada fue tomada del blog brazencareerist.

3 de marzo de 2013

Jóvenes de palabra

A varias personas no les importa tener credibilidad frente al resto, es decir, no les importa que el resto diga de ellos que son personas en los cuales no se puede confiar, personas que no pueden mantener un secreto, personas que llegan tarde o personas a las cuales no se les cree ni la risa.

Y eso talvez te de risa, pero a Dios no. Pues nosotros como sus hijos, somos los llamados a ser como él, jóvenes de palabra, que reflejemos el carácter de Jesús en nuestra vida, que se note que él vive en nuestras vidas. Es así que cuando te ofrezcan beber licor, drogarte, pecar tu digas con convicción NO. Pero recurramos a la palabra de Dios para analizar lo que Jesús nos enseña:

"También han oído que se dijo a sus antepasados: 'No faltes a tu juramento, sino cumple con tus promesas al Señor.' Pero yo les digo: No juren de ningún modo: ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. Tampoco jures por tu cabeza, porque no puedes hacer que ni uno solo de tus cabellos se vuelva blanco o negro. Cuando ustedes digan 'si', que sea realmente sí; y cuando digan 'no', que sea no. Cualquier cosa de más, proviene del maligno."
              Mateo 5: 33-37


Jesús es muy claro cuando nos dice NO JUREN, porque básicamente juramos por cosas que no nos pertenecen, por cosas muy importantes. Por ejemplo juramos por nuestra madre, por nuestro trabajo, por nuestra vida, etc; cosas que a la final no son nuestras sino de Dios. Y lo peor que juramos por cosas que no vamos a cumplir, es por esto que muchos pierden esa credibilidad ante el resto.

Personalmente la parte que mas me gusta es cuando mi Señor nos manda a que nuestro si sea si y que nuestro no sea no, pues para algunos el no cumplir con su palabra o cumplir con lo que ofrecemos no es importante. No importa que alguien te necesite, que confíe en ti, no importa el lastimar el corazón de alguien más. Y me puedes decir exagerado o lo que tu quieras, pero no te gusta cuando alguien en quien tu confiabas te falla, porque tu asumías que esa persona cumpliría lo que te ofreció, sea tu papá, mamá, herman@s, amigos, etc. 

Sin embargo no solamente se refiere a esto, sino que también cuando nosotros le 'ofrecemos' a Dios cambiar de actitud, le lloramos y le prometemos o juramos que vamos a cambiar y dejar de pecar; y sin embargo, volvemos a pecar, volvemos a caer en lo mismo.

Obviamente, nosotros somos débiles y podemos caer en la tentación en algún momento, pues no somos perfectos. Me refiero en el sentido en el que pecamos estando conscientes de que estamos fallando y así con nuestra actitud pisotear todo el amor de Dios. Y quiero confesarte, que este fue el gran error de mi vida durante mucho tiempo.

Finalmente, meditemos en que el cambio siempre empieza por nosotros. Si queremos que el resto pueda ver en nosotros a un cristian@ confiable, debemos comenzar confiando plenamente en Jesús; cumpliendo así como Él lo que decimos.

Dios te bendiga
DC

Nota: Las imágenes mostradas fueron tomadas del blog texasswimming y blog.tetti.de, respectivamente.