18 de agosto de 2013

El viaje III

Para finalizar esta serie de temas que hemos venido hablando desde hace dos semanas; en esta ocasión quiero puntualizar lo que significa el viaje, y la razón por la cual esta serie se llamó de esta manera.

Pues nuestro viaje comenzó en el momento que nacimos y terminará cuando veamos a nuestro Salvador; este viaje viene lleno de sufrimiento, dolor, alegrías y felicidad, pero recuerda que Jesús dijo:

"Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo"
Juan 16:33

Pero para finalizar esta serie de temas, quiero que podamos pensar en ese maravilloso amor que Dios tiene para cada uno de nosotros. ¿Darías la vida de tu hij@ por la de otras personas que no conoces? Pues eso es lo que hizo Dios por tí y por mí, el amor que Dios demostró en la cruz por nosotros no tiene medida, y es algo que jamás podré entender o cuantificar. El hecho de que Dios haya mandado a su propio hijo para salvar a todos los que en Él crean es lo más hermoso que alguien ha hecho o haga por mi.

Es ese amor el que nos hace falta en cada momento de nuestras vidas, el amor que Dios pone en nosotros cuando estamos a su lado, cuando nos acercamos a Él por medio de la oración y obediencia. Al permitirnos estar vivos un nuevo día, el estar sanos, el tener a una familia, el poder ver, sentir, comer, hablar; y digo esto porque muchos de nosotros no valoramos estas cosas.

Recuerda que nosotros solo estamos aquí de paso, y que llegamos a este mundo sin nada. Y si todavía no has experimentado la muerte de algún ser querido, te puedo decir que ese dolor jamás se va por más que pasa el tiempo; por eso ahora en cada momento que puedas valora y ama lo que Dios te ha dado, sobretodo esas personas que forman parte de tu vida.

Si mi Dios me demuestra cada día que me ama, que dio su vida por mí, que solo quiere lo mejor para mí, que le duele cuando le desobedezco, que me aleje de Él; ¿cómo puedo yo darle la espalda? Pues esa es nuestra naturaleza humana, y la cual debo cambiar en este viaje.

Much@s jóvenes no tienen miedo de decir al mundo entero que aman a su pareja, pero ¿cuántos de nosotros podemos gritar que amamos a Jesús con nuestras acciones y boca?


Dios te bendiga
DC

Nota: La imagen mostrada fue tomada de la página turnbacktogod.

11 de agosto de 2013

El viaje II

Continuando con el tema de la semana pasada, en esta ocasión quiero hablar del camino, pues a muchas personas he escuchado que todos los caminos, refiriéndose a las religiones conducen al mismo Dios. Y probablemente no he sido el único que lo ha escuchado, sin embargo en esta oportunidad veamos a la luz de la palabra si es cierto:

"Yo soy el camino, la verdad y la vida - le contestó Jesús. Nadie llega al Padre sino por mí."
Juan 14:6

Como podemos leer, no existe sino UN único camino, Jesús, Él es el único camino para llegar al Padre. Por lo que no es cierto que existen muchos caminos para llegar a Dios, y si pensamos un poco más alla, podremos darnos cuenta que el islam lo ve a Jesús como un profeta más o el budaismo define a Buda Guatama como el camino a la perfección. A partir de estos dos pequeños ejemplos, es como podemos definir que esa frase dicha por muchos está equivocada.

Pues nosotros como seguidores de Cristo y así conocidos como cristianos, debemos ver siempre en la palabra de Dios si algo es correcto o no, y en este punto es importante definir que aunque existan muchas religiones en el mundo ninguna de ellas te hará salvo, sino y únicamente Jesús.

"que si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo."
Romanos 10:9

Dejemos en claro este último punto, pues no hay ninguna religión en el mundo que te pueda salvar, sino y únicamente Jesús, pues Él es el camino, la única verdad y la vida entera. Por lo tanto, el aceptar a Jesús como el Señor de tu vida implica que ahora ya no se trata de ti, sino de Él. Significa que ahora debemos aprender a vivir a Su manera y no a la nuestra, a pensar y actuar como Él quiere que lo hagamos.

Muchos de nosotros a veces hemos escuchado a otros llamar a Jesús, Maestro, o incluso nosotros mismos le llamamos así; pero es importante darnos cuenta de lo que implica, pues el hecho que nosotros seamos sus seguidores implica que debemos actuar, pensar, hablar, vivir, escuchar y amar como Jesús como quiere que lo hagamos, como nos enseñó a través de su palabra.

Realmente esto es lo complicado, y lo que muchos hemos fallado. Este es el gran problema por lo que muchas personas ven en nosotros los cristianos un ejemplo erróneo de lo que significa ser hij@ de Dios.

Dios te bendiga
DC

Las imágenes mostradas fueron tomadas de la página wallpaperscristaoshits.tamillike, respectivamente.

4 de agosto de 2013

El viaje I

¿Por qué muchas veces tenemos que esperar a estar en el peor momento de nuestras vidas para regresar a ver a Dios? o una vez que estamos en el fondo de nuestros problemas recordar que existe un Dios y buscarlo desesperadamente aunque antes no nos importaba.

Si preguntas el testimonio de algunas personas cercanas a tu vida, te podrás dar cuenta que muchas de esas personas llegaron a Jesús porque se encontraron en la peor situación que pudieron pasar o porque estaban tan desesperados por las cosas que estaban viviendo que sentían que lo único que les podía ayudar es algo que conocían que se llamaba Dios.

O muchos de nosotros a veces tenemos la bendición de nacer en un hogar cristiano, sin que esto quiera decir que no hemos experimentado la misma desesperación por no encontrar la solución a nuestra peor situación. Pues el hecho de que muchas personas nazcan o crezcan  en un hogar cristiano, no asegura que esta persona será por su vida entera un@ verdader@ hij@ de Dios. Creo que el caso mas común para demostrar esto último, es cuando el hij@ del pastor se convierte en todo lo contrario a lo que espera la sociedad de un hij@ de un pastor.

A la final lo que quiero decir es que puedes pasar por un momento de tu vida en la cual te alejes de Dios por completo, por más que hayas nacido en un hogar cristiano o no. La pregunta aquí es, ¿por qué tener que esperar hasta ese momento de nuestras vidas para regresar a ver a Dios, para recordar que Dios existe y para recién en ese momento darnos cuenta que lo necesitamos?

Pensando en esta pregunta, me di cuenta que nosotros como personas somos los que "esperamos" hasta este momento; hasta el último para regresar a ver a Dios. Y es porque como pecadores que somos todos, nuestra naturaleza es alejarnos de Dios en cada circunstancia que se presenta, y por lo tanto escoger el camino más fácil.

Sí, como estás leyendo. El pecar es escoger el camino más fácil, porque el seguir a Cristo es de valientes, es de personas y jóvenes decididos en ir en contra la corriente, en decir no a lo que Dios llama pecado, y en darnos la vuelta cuando sabemos que lo que estamos haciendo está mal antes los ojos de Dios.

Y esto es lo realmente difícil, porque para nosotros lo más fácil es ser aceptados por esta sociedad y porque somos débiles. Pero recuerda que no eres el único que pecas, todos lo hacemos cada día, unos más otros menos, pero en eso consiste la vida de un@ cristian@, en dejar que el Maestro nos enseñe como vivir en este mundo.

Dios te bendiga
DC

La imagen mostrada fue tomada de la página es.my-walls.net